La primera edición de nuestro ciclo de charlas Ganadería de Precisión contó con la presencia del PhD. Aníbal Pordomingo. En esta nota te contamos algunos de los puntos más destacados de la charla.
- Aníbal comenzó explicando que aunque la ganadería de precisión es un concepto en constante evolución y que a veces puede parecer ambiguo, es en definitiva una búsqueda de procesos de producción más predecibles.
En la actualidad todo apunta a ser más preciso, sobre todo con los aportes de las tecnologías que comúnmente llamamos 4.0 o AgTech, las que nos van permitiendo entrar en el universo de la precisión con mayor grado de medición.
El Ingeniero afirmó que la ganadería del futuro (o al menos la de mediano plazo) que los productores ya están pensando es aquella que realmente refleja hacia la cadena. En los últimos tiempos la presión de mirar el proceso de producción con lo que Aníbal llama “sus espejos” es cada vez mayor. Antes las producciones miraban “su propio espejo”, pero hoy eso ya no alcanza. “A mí me gusta esta metáfora de que el espejo sea lo que queremos generar como producto” dijo Pordomingo.
Muchas experiencias y estudios demuestran que gestionar eficientemente un rodeo conociéndolo es muy importante por sus efectos residuales en los productos posteriores más allá del proceso de cría. Cuando se hacen las cosas bien en un compartimento de toda la cadena probablemente tiene reflejos en los compartimentos posteriores.
Con respecto a los pilares que hoy desafían a la ganadería, Aníbal habló de tres que son muy relevantes y evidentes en la actualidad. - Residuales de la selección por fertilidad: La oportunidad de construir mucho ordenando el rodeo de cría o la “vaca cabeza”, o manejar el animal de los primeros 60 días de servicio pensando que ese animal no solamente ofrece una oportunidad de un buen procreo o un buen porcentaje de destete para ese ciclo, sino que ese destete además tiene otros atributos.
- Genética carnicera: No quedarse solamente con el animal en vivo, sino mirarlo del lado de adentro, de la carcasa, de la res, de la carne efectiva. El concepto de generar una genética que sea carnicera implica que por cada animal que se coseche no se esté tan confundido con el peso vivo sino más bien mirando el rendimiento de carne efectiva, cuánto de esa carcasa o de ese animal efectivamente llega a la góndola o a las manos del consumidor.
- Genética de la eficiencia de conversión: Esto tiene mucho que ver con la capacidad del bovino de mejorar en el tiempo para convertir los recursos y los insumos en carne con la mayor eficiencia y el menor impacto ambiental, es decir, producir con la misma cantidad de insumos más carne o con menor cantidad de pastos, granos y fuentes de energía la misma cantidad de alimento. Las tecnologías de la precisión son las que van permitiendo cada vez más medir esta conversión.
¿Por qué queremos conocer cuánto y cómo comen los animales?
Básicamente para poder anticiparnos a los efectos, prevenir problemas y prever soluciones.
Observando a un grupo de animales en tiempo real y viendo cuánto comen se puede hacer una estimación y relacionar su aumento de peso y su peso vivo con ese consumo, entonces el grupo genera una regresión múltiple donde se puede predecir. En este sentido aparece un concepto llamado consumo residual.
Teniendo en cuenta ciertos datos como el peso del animal y la cantidad de kilos que aumenta por día, se pueden esperar ciertas estadísticas de consumo. Si luego ese animal mide distinto a lo que creíamos, se da un diferencial de consumo entre lo que uno esperaría que haga con lo que efectivamente hace. Esto es el consumo residual o RFI (Residual Feed Intake).
Aunque parezca un contrasentido, los valores negativos de consumo residual son los deseables, porque un RFI negativo nos dice que el animal come menos de lo esperado para producir lo mismo.
El animal con RFI más negativo o más bajo probablemente tenga una índice de conversión de alimento a peso menor, o sea una eficiencia de conversión mayor.
Para esto, es importante ir ajustando lo que antes era un manejo casi de grupo, de manada, de lote. No quiere decir que tengamos que administrar cada animal en particular, pero probablemente ser más precisos sirva para ordenar algunos puntos clave del proceso. “A mí me parece que un salto que va a dar la ganadería es con el registro individual” comentó el ingeniero. En relación con esto, Pordomingo aconsejó comenzar por ponerle a las vacas algún caravaneo, ya sea electrónico o no, pero ordenado para tener más información sobre el individuo.
“Sería interesante encontrar los individuos que comen menos de lo esperado pero que a su vez aumentan más que el promedio en ese grupo” dijo Aníbal. La precisión de la ganadería y el ordenamiento de la variabilidad entraría en juego si pudiéramos lograr que eso se transmita genéticamente a sus descendientes. La mejora viene porque hay un ordenamiento y un seguimiento de los individuos.
Van apareciendo cada vez más herramientas, algunas todavía algo complejas pero que van haciendo posible un mayor seguimiento de los individuos con mayor automaticidad y mayor gestión remota.
Monitores de aguadas, antenas y paneles solares para bombear agua, ecografías de área de bife, de espesor de grasa, de contenido intramuscular, entre otros, son algunos de los ejemplos más destacados. El ingeniero cree que con el correr del tiempo más tecnologías se sumarán a los procesos ganaderos.
“Yo creo que la ganadería transita hacia un modelo que no es solamente un apilado de disciplinas donde le vamos sumando capas, como a veces estudiábamos en el pasado. Los sistemas ganaderos actuales y los que vamos a ver en el futuro son más dinámicos. Son procesos todo el tiempo interactivos. Para mí el mundo de la ganadería 4.0 no es solamente incorporar electrónica, es un mundo de gestionar datos. Hay que saber qué hay que medir y no puede crecer sin medir” comentó Pordomingo.
En lo que respecta a sugerencias para empezar a incorporarse a este ciclo de ganadería de precisión, Aníbal destacó el hecho de mostrar el origen y la historia de los animales. “Si uno mira cuáles son los mejores terneros en un remate, no necesariamente son los que ese día son los más bonitos, sino que hay mucho del campo que le dio origen a ese ternero, de la historia de toda esa genética” explicó.
Mirá la charla completa en YouTube haciendo clic ACÁ y suscribite a nuestro canal para no perderte ninguna novedad. Allí podrás encontrar las charlas que pasaron y podrás ver las que vienen. ¡No te las pierdas!
¡Gracias Aníbal por formar parte de nuestro espacio de capacitación Academia de Genética Animal!